Muy estimado William Shakespeare,
Reciba un cordial saludo esperando se encuentre bien. Es para mí un placer poder escribirle a través de esta carta. En el vasto escenario literario sus obras se erigen como monumentos atemporales que iluminan las complejidades del alma humana. Sé que no son pocas las obras que usted ha escrito, no obstante, “Otelo” ha llamado plenamente mi atención. Su tragedia emerge no sólo como un drama magistral que relata la triste y dolorosa caída de un líder, sino que también desenmaraña los hilos más delicados de las relaciones humanas: la confianza. En la sombría Venecia y la enigmática Chipre pintadas por sus palabras, la confianza se convierte en aquel valioso y anhelado tesoro que los protagonistas buscan ardientemente. Es la confianza aquel baluarte desde el cual construye y derriba los destinos de los personajes de la obra, y este es el valor controvertido en el que quiero centrarme en esta carta.
Antes de empezar, me gustaría aclarar qué entiendo por confianza. Podría limitarme a la definición que da el diccionario de la Real Academia Española: «esperanza firme que se tiene en alguien o algo» (1). Sin embargo, usted presenta este valor como algo bastante complejo y multifacético, incluso trágico. Cada línea de esta tragedia resuena con la importancia y fragilidad de la confianza, y cómo la ausencia, o peor aún, la traición de ésta puede transformar la luz en oscuridad y la certeza en duda.
¿Cómo se puede observar este valor en cada uno de los personajes? Quiero examinar, en primer lugar, a Roderigo, presentado como un joven de familia ostentosa que se enamora perdidamente de Desdémona (2) .Sin embargo, éste carece de la astucia y la perspicacia suficientes para reconocer la maquinación que se teje a su alrededor. La representación maestra de Roderigo radica en su ingenuidad, vulnerabilidad emocional y la confianza desmesurada depositada en Yago, la cual es explotada para fines oscuros. A medida que la obra progresa, la confianza en la figura manipuladora del antagonista se vuelve fatal, contribuyendo de manera irremediable al desenlace trágico no sólo del personaje sino también de la historia en su conjunto (3).
En un segundo análisis, se presenta a Casio como un teniente honorable y leal dentro del círculo de confianza de Otelo. A pesar de su aguda inteligencia, la maquinación magistral de Yago socava la confianza de Casio, evidenciando así la ironía trágica de cómo un individuo tan íntegro puede caer víctima de la manipulación. En contraste con Roderigo, la confianza de Casio se arraiga en su posición militar y en la supuesta integridad de su entorno. Esta confianza, sin embargo, se va estrechando a medida que avanza la trama, al punto que Casio sin percatarse de las consecuencias nefastas permite que Yago lo embriague (4). La habilidosa manipulación de Yago convierte a Casio en el chivo expiatorio perfecto para la destrucción de Otelo. Este oscuro giro revela la complejidad de las relaciones de confianza y cómo incluso aquéllos considerados honorables pueden sucumbir ante el maquiavélico juego de las artimañas.
Emilia, la esposa de Yago deposita una confianza inquebrantable en su esposo, ajena al malvado ardid que éste va orquestando para desmantelar la relación entre Otelo y Desdémona (5). A medida que se desarrolla el drama, la confianza de Emilia en su cónyuge se desvanece progresivamente. La analogía coloquial de considerar a Emilia como el “cabo suelto” de Yago sugiere la fragilidad de su posición y su eventual papel revelador en la trama. Cuando Emilia acumula pruebas suficientes para resolver el rompecabezas urdido por su esposo, se encuentra en la encrucijada de defender la verdad y demostrar las artimañas que su cónyuge ha tejido alrededor de los personajes. Aunque la confianza, en su esencia, posee una fuerza redentora y liberadora, su. trágico desenlace para Emilia evidencia la ironía que envuelve este valor en el contexto de la obra (6).
Paralelamente al papel de Emilia, se destaca el personaje de Desdémona, hija de Brabantio, como una mujer que manifiesta una apasionada devoción hacia Otelo (7). La confianza que Desdémona deposita en el general moro es ejemplar caracterizándose por su plenitud y lealtad (8) , incluso en situaciones donde sus decisiones y acciones son tergiversadas por las artimañas de Yago (9). Aunque el texto no explicita el vínculo de confianza entre Desdémona y Yago, se sugiere de manera implícita que, al confiar Otelo en Yago, Desdémona extiende su confianza hacia este último. Esta confianza genuina e ilimitada, sin embargo, se convierte en una debilidad trágica en manos del maestro del engaño, Yago, quien siembra dudas en el corazón de Otelo. La inquebrantable confianza de la hija de Brabantio se transforma en su propia sentencia de muerte.
Finalmente, en esta obra homónima, usted muestra a Otelo, el destacado general moro de la literatura inglesa que emerge como el pináculo que conquista no sólo un destacado rango militar sino también el amor de la hermosa Desdémona. Sin embargo, la tragedia en que usted envuelve a Otelo se desarrolla a través de la paradoja de su falta de confianza. Mientras Desdémona deposita una confianza ciega en su esposo, Otelo, por otro lado, muestra una desconfianza generalizada en todo y en todos, a excepción de una persona: Yago. Este general moro confía inadvertidamente en la persona equivocada, una confianza tan arraigada que le impide desentrañar los malentendidos sembrados por Yago en la imagen de la hija de Brabantio. Este malentendido contribuye al lento y doloroso colapso de la figura, el honor y todo lo preciado para el protagonista. En términos más precisos, «esta falta de comunicación se transforma en una carencia de intimidad» (10).
Usted sabe perfectamente que podría terminar esta carta aquí. Sin embargo, hay una pieza clave que no se me puede escapar de la mano. Lo mejor de todo es que usted sabe mejor que nadie quién es esta pieza clave: Yago, un protagonista eclipsante que, paradójicamente, parece arrebatar el protagonismo a Otelo en su propia tragedia, ya que usted no hace otra cosa que exaltar la complejidad y la astucia maquiavélica de este personaje. Yago es un personaje que ha ahondado y profundizado como ningún otro en el valor de la confianza. Es por esto, precisamente, que este maestro del engaño sabe cómo y hasta qué punto puede manipular sutilmente este valor en sus camaradas, gestando así una meticulosa venganza contra Otelo. Lo que añade mayor profundidad a la maestría de Yago es su habilidad para erigirse como el epicentro de confianza para todos los personajes, consolidando así su influencia insidiosa en la trama.
Su obra, queridísimo Sir William me muestra de una manera patente que la confianza es más que la esperanza firme que se pone en algo o alguien, como mencionaba en los primeros párrafos de esta carta, sino que este valor se manifiesta como la frágil línea entre la verdad y la traición, donde los personajes depositan su fe y credibilidad en otros, exponiéndose a la posibilidad de una desilusión devastadora. Es un nexo vulnerable entre las almas, tejido con la esperanza de reciprocidad, pero que, en manos de un maestro manipulador como Yago, se convierte en un hilo que, al ser tirado con astucia, desenreda las conexiones más sólidas y lleva a la tragedia. La confianza en “Otelo” se presenta como un tesoro preciado, pero, paradójicamente, también como una moneda de doble cara que puede comprar lealtad genuina o desencadenar la ruina, dependiendo de la sinceridad de quienes la comparten.
Referencias
- DICCIONARIO ESCENCIAL DE LA REAL ACADEMIA ESPAÑOLA, «Confianza», s.f., en https://www.rae.es/desen/confianza (referencia en el 6 de noviembre, 2023)
- W. SHAKESPEARE, Othello, The New Penguin, United States 1968, 49.
- Ibid, 160.
- Ibid, 90.
- Ibid, 116.
- Ibid, 175.
- Ibid, 71.
- Ibid, 141.
- Ibid. 117.
- E. GILHOOLY, LC, To A Younger Brother, IPF Publications, United States 2022, 54.
Bibliografía
DICCIONARIO ESCENCIAL DE LA REAL ACADEMIA ESPAÑOLA, «Confianza», s.f., en https://www.rae.es/desen/confianza (referencia en el 6 de noviembre, 2023)
- GILHOOLY, LC, To A Younger Brother, IPF Publications, United States 2022.
W. SHAKESPEARE, Othello, The New Pen